Ahora que se acerca diciembre, podríamos decir que nuestro equipo de asistencia técnica es como ese regalo que te llega por Navidad: todos lo esperan con ansia. Ellos son la cara visible con los clientes y la voz que responde a tras el teléfono ante cualquier petición. En este capítulo, os presentamos a parte de nuestro equipo del SAT. ¡Descubre cómo es pasar un minuto con ellos!
No están todos los que son, pero son todos los que están. Nuestro departamento de asistencia técnica está compuesto por más de 80 personas distribuidas por las seis filiales europeas, dispuestas a poner en funcionamiento cualquier máquina. España, Francia, Reino Unido, Alemania, Italia, Dinamarca… No hay ni país ni frontera que se les resista. En CMZ apostamos por el cuidado del producto y servicio desde dentro, y por ello contamos con equipo propio que da servicio allá donde estén nuestros tornos. Su principal cometido es la instalación, puesta en marcha y formación de los clientes, además de la asistencia telefónica ante cualquier incidencia o duda.
Ellos son los Senséi de los tornos CMZ y todos los clientes los esperan con ganas para empezar a operar de manera autónoma y dar el pistoletazo de salida a la producción. Para el equipo de asistencia técnica, no hay mayor satisfacción que ver que los usuarios pueden utilizar la máquina con autonomía tras su visita. El viaje no acaba ahí: brindamos un acompañamiento continuo durante todo el ciclo de vida de la máquina. Para ello, contamos con un equipo humano específico en cada una de nuestras filiales que se encarga de brindar asistencia telefónica gratuita sea cual sea la necesidad del cliente.
Su día a día es lo más diferente a un trabajo rutinario de oficina que te puedes encontrar. La practicidad es uno de sus mantras, ya que se enfrentan a las particularidades de muchísimas empresas en variedad de sectores industriales, siendo cada una de ellas un reto en sí mismo. Al fin y al cabo, los componentes del servicio de asistencia técnica están siempre dispuestos a ayudar a los clientes con sus diferentes retos de mecanizado. Además, no hay rincón al que nuestros tornos CMZ no puedan llegar, lo que significa que siempre están viajando a diferentes lugares.
Por eso, se puede decir que no existen dos días iguales. Si eres de esas personas a las que les gusta llevar a la práctica todos tus conocimientos, salir de la rutina y ponerte a prueba, el servicio de asistencia técnica de CMZ tiene un hueco para ti. Al final del día, cuando la máquina saca viruta y los usuarios están capacitados para operar con ella de forma autónoma, te vas con un buen sabor de boca y la satisfacción del trabajo bien hecho.